domingo, 10 de abril de 2016

Trolls. La entrada más prohibida de la red

Le he estado dando vueltas, en esta ocasión me voy a comer la mitad de las explicaciones
ahora sí que creo que sería una irresponsabilidad explicar de más
razón por la cual expondré lo suficiente como para ayudar a que la gente entienda
según qué conceptos
Hoy hablaré de las falacias


Cuentan las crónicas bíblicas que uno de los discípulos, el que traicionó a Jesús, salió corriendo arrepentido y acabó colgado y, acto seguido, se le abrió la cabeza al despeñarse por un barranco. Suena curioso que cada testigo enfatizara exclusivamente o en que se colgó o en que se cayera. Sin embargo, lo interesante del asunto es que se piense que realmente Judas existiera sólo porque se debate sobre su muerte.

Me he dignado a buscar y buscar, y será porque no soy buen investigador..., quizá me falte más horas de investigación - horas que acabaré gastando - pero sólo fui capaz de encontrar una página/autor con una manera de clasificar las falacias como yo mismo lo haría.

En la novela Luces y Espectros, como ya mencioné en otra entrada, hay un sitio para el discernir de la lógica, así como del buen uso del escepticismo. Que no se trata de encontrar una excepción a todo (lo que tildaba como excepticismo), sino de saber crear un halo de defensa de un estilo que todos aceptaríamos.

Si eres consciente, ya no puedes ser tolerante.
El mundo que muchos nos intentan vender, cuando está colgado, se llena de simbolismos completamente inaceptables que también son inasumibles por ellos mismos. Ya mencioné en otra entrada que cuando falla la lógica entonces no hay manera de remediarlo, no existe pedagogía para el que no quiere aceptar la correcta inferencia de los hechos.

Una falacia ha sido correctamente y bien definida en todos los sitios que he visitado por Internet: se trata de un mal uso de la lógica. Quisiera incidir en un detalle: me da la impresión de que la mayoría de las personas con las que he entablado un diálogo no tiene ni la más remota idea de lo que es una falacia. Y quizá yo tampoco, aunque por esto último ya sí me preocuparía - porque soy informático y el manejarse con lo que es falaz y lo que no es fundamental para interpretar los documentos de requisitos.

Falacia. Y muchos no lo ven
Existe la extraña creencia de que hay ciencias de primera y ciencias de segunda. Bien es posible que existan carreras María, ese tipo de programaciones que se diseñan para hacer que los profesionales puedan trabajar enseñando esa clase de cosas. Ahora bien, más allá de esas ciencias que se retroalimentan a sí mismas sólo por el detalle de que hay revistas, autores, lectores..., y entre todos se comen lo mismo que emiten...

El cerdo que escape no lo tendrá fácil, porque no comprende
Digamos que lo que defiendo yo es que una falacia se produce cuando se hace un mal uso de una ciencia exacta. Y sabemos lo que es una ciencia exacta cuando ésta se rige por un sistema axiomático y de reglas. 

Es decir, un mal uso de las reglas o un mal uso en la aplicación del modelo sobre la realidad es lo que nos lleva a los dos tipos de falacias. Sin embargo hay algo que sigo buscando en los diversos libros que he leído al respecto y que, posiblemente, no haya buscado lo suficiente: toda falacia tiene una razón de existir, puede convertirse en una afirmación lógica razonable. Es decir, las falacias de un tipo son razonamientos válidos cuando se aplican dentro de una lógica propia del otro tipo.

Blancas juegan y Kasparov pega una patada a la silla.
Me explico de manera más rigurosa: La lógica tiene dos tipos de implicadores. Tenemos el implicador booleano (el de toda la vida) y tenemos el implicador material (el que le da sentido a las consecuencias experimentales). El primero es formal y el segundo podríamos llamarlo no formal. Francamente, no es difícil adivinar que al final una falacia se pueda definir fácilmente por hacer un mal uso de un silogismo - es decir: por aplicar un silogismo material sobre el formal o viceversa.

Si no me creéis, id a la lista más exahustiva y coged una falacia al azar: el origen podrá ser porque se le ha atribuido algo sintético sobre lo analítico o porque se le ha dado un carácter analítico a lo sintético (palabras de Kant). Sin embargo, quizá el primero en discurrir sobre estos temas sería Leibniz - aunque no asociara esta clasificación ontológicas a las preocupaciones aristotélicas de acabar con los sofismos para clasificarlos.

Un chiste es una falacia visualizable sin persistencia. De mantenerse sería un drama.
Saber estas cosas permitiría al troll, al usuario que obra para poner en jaque cualquier intención de pensamiento, tener una especial ventaja. El experto en falacias que disponga de esta información tiene la obligación de no alimentar los dogmas; razón por la cual en informática no se acepta en los círculos de usuarios a cualquiera. Para mantener una conversación antes deben superar unos límites de méritos y ética. Es cuestión de vocación.

¿Venezuela? No, Nueva York. No alimentéis los montajes de Antena 3.
Existe una fórmula de éxito dentro de la literatura, consiste en crear una permutación de una realidad. Es decir, generar una variación de unos hechos conocidos. Sin embargo ahí no acaban los simbolismos, aún hay que mantenerse y justificar lo que se hace. Si no se rompe la cuerda, el meme se alimentará por cada espectador. Es la idea de la máscara del alquimista en la novela Luces y Espectros.


Todo esto es combinable con un tipo de condicional que no ha sido aún definido por los lógicos, pero que se parece al condicional estricto. Ya veremos si mi documentación, que es en este sentido complicada incluso para mí, aunque muy fructífera, sale algún día a la luz.




Creo que aún no he explicado qué son
los alquimistas en mi mitología
ya habrá tiempo
Quiero que comentéis



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